El Papa impuso hoy el Palio a 34 Arzobispos...

El Papa impuso hoy el Palio al nuevo arzobispo de Calabozo, Estado Güarico, Venezuela...

Ciudad del Vaticano/Toledo, 29 jun (EFE).- El Papa impuso hoy en el Vaticano el Palio, símbolo de comunión con el Obispo de Roma, a 34 arzobispos de todo el mundo, entre ellos el de Calabozo, Manuel Felipe Díaz Sánchez.
Benedicto XVI impuso también el Palio al nuevo arzobispo de Valencia, Carlos Osoro Sierra, junto tres obispos mexicanos, un salvadoreño y cuatro brasileños.
Los mexicanos son Domingo Díaz Martínez, arzobispo de Tulancingo; Víctor Sánchez Espinosa, arzobispo de Puebla de Los Ángeles, y Carlos Aguiar Retes, arzobispo de Tlalnepantla.
Los españoles son Carlos Osoro Sierra, arzobispo de Valencia, y Braulio Rodríguez Plaza, de Toledo.
El colombiano es Ismael Rueda Sierra, arzobispo de Bucaramanga; y el salvadoreño es José Luis Escobar Alas, arzobispo de San Salvador.
Los brasileños son Sérgio da Rocha, arzobispo de Teresina; Maurício Grotto de Camargo, arzobispo de Botucatu; Gil Antônio Moreira, arzobispo de Juiz de Fora, y Orani João Tempesta, arzobispo de San Sebastián de Río de Janeiro (Brasil).
También recibieron el Palio los arzobispos de EEUU Allen Henry Vigneron (Detroit), Thimoty Michael Dolan (Nueva York), Robert James Carlson (San Luis), George Joseph Lucas (Omaha) y Gregory Michael Aymond (Nueva Orleans).
El Palio es una faja de lana blanca, de entre cuatro y seis centímetros de ancho, con seis cruces de seda negra bordadas longitudinalmente.
Están confeccionados con la lana de dos corderos blancos que tradicionalmente eran bendecidos en la basílica romana de Santa Inés en Nomentana el 21 de enero de cada año, la festividad de la santa.
En los últimos años han sido bendecidas en el Vaticano, donde son llevados los corderos ante el Papa en sendas cestas de mimbre decoradas con flores.
Los dos animales, ofrecidos por el cabildo de la basílica de San Juan de Letrán siguiendo una antigua tradición, son más tarde entregados a las monjas benedictinas de Santa Cecilia, que se encargan de esquilarlos y confeccionar los palios.
Al principio el Palio era un signo litúrgico exclusivo de los papas, aunque más tarde éstos lo concedieron a los obispos que habían recibido de Roma una especial jurisdicción.
El primer Papa que lo concedió fue Simmaco, en el año 513 y lo impuso a Cesario, obispo de Arles (Francia).
Desde entonces se extendió esta imposición a los arzobispos metropolitanos.

EFE